Salta la Linda

(Me tomé mi tiempo para escribir este post pero por fin llegó)

La primera semana de octubre viajé a Salta para el primer Congreso Sudamericano de Parques Urbanos. El congreso duró tres días, y el resto de la semana me dediqué a recorrer la ciudad y los alrededores.

Salta es una ciudad súper tranquila y me pareció perfecta para un break cortito, un fin de semana largo o Semana Santa. Hay muchas cosas para hacer ahí y en los alrededores.

Qué hacer en Salta

Día 1- City Tour y visita a la Quebrada de San Lorenzo.

Día 2- Tour a Salinas Grandes y Purmamarca.

Día 3- Centro de Salta, museos y Cerro San Bernardo.

Día 4- No me quedé tanto tiempo pero lo que faltó hacer fue ir al sur, hacia Cafayate, para un Tour del Vino.

Cómo moverse

Transporte público. El sistema de buses funciona con una tarjeta que se llama Saeta, cuesta 70 pesos y a eso hay que sumarle el costo de cada viaje, que es 24 pesos. Las tarjetas se compran y recargan en kioskos dispersos por la ciudad.

Taxi o Remis. No hay Uber en la ciudad, así que estos dos son los medios de transporte alternativos al público. No son caros en comparación con otras ciudades. 

Dónde Comer

El Charrúa. Es una churrasquería que queda sobre la calle Caseros, en el centro de la ciudad. Comí una riquísima parrilla para 2 por más o menos 900 pesos, tenían aderezos y salsitas para acompañar, como chimichurri y picante, que eran deliciosos. Creo que no abre al mediodía, pero para cenar está más que recomendado.

Monasterio. Aunque no cené en este lugar, sí recomiendo ir una noche que tengan ganas de salir a tomar. Hay varios tipos de cerveza de todos los sabores, además de tragos y otras bebidas como Fernet. En el frente se puede jugar futbolito y en cada mesa hay una caja de Jenga. El ambiente es muy agradable y es especial para salir entre amigos.

Rústiko. Queda frente a la Plaza 9 de Julio, al lado del Cabildo. Fuimos para almorzar y había una gran variedad de opciones y todo se veía demasiado bien. Las porciones son generosas y no es caro.

Dónde Hospedarse

Salta es una ciudad pequeña y el centro es muy caminable, así que obviamente recomendaría hospedarse hacia ahí.

Yo me quedé en un Airbnb sobre la calle Caseros (foto más abajo), a pocas cuadras de la plaza y podría llegar caminando a prácticamente cualquier sitio turístico del centro de la ciudad. Estaba súper bien ubicado y era un departamento súper lindo y completo, con todas las comodidades.

Otro hospedaje bien ubicado que conozco es el Gran Hotel Presidente, en donde se hospedaba mucha gente que también asistió al Congreso.

Cómo llegar

Salta tiene tanto una terminal de ómnibus como un aeropuerto internacional. La terminal queda en el centro así que el costo del traslado hasta nuestro hospedaje fue muy bajo.

Desde Asunción no hay ni buses ni vuelos directos hasta Salta. Los vuelos hacen escala en Buenos Aires y las escalas pueden ser muy largas (en las fechas que fuimos, había escalas de 10 horas) que es más que suficiente para hacer una visita a la ciudad. 

Nosotros optamos por ir en bus, que tomaba más o menos el mismo tiempo (16 horas en bus vs. 14 horas entre vuelos y escala) por una fracción del precio. Hicimos una parada en Resistencia para cambiar de bus y viajamos toda la noche desde ahí hasta nuestro destino final.

Compramos los pasajes directamente de la terminal de Asunción, de la empresa El Pulqui. Hay que admitir que el nombre no me inspiraba confianza, pero los buses eran muy cómodos y hasta te servían sandwichitos durante el viaje. Todos los tramos fueron en butaca cama y en total nos costó prácticamente 1/4 del costo del pasaje aéreo.

Salta

Es una ciudad muy tranquila y pintoresca, rodeada de cerros. Las noches no parecen ser demasiado activas, hay restaurantes y bares pero poco más que eso. Yo diría que es más bien una ciudad para ir a descansar y hacer excursiones por los alrededores, un punto de partida más que un destino en sí mismo, a pesar de que vale la pena dedicarle por lo menos un día a la ciudad porque es muy linda. La gente es muy agradable y el turismo está bien potenciado, así que es casi imposible aburrirse si es que se planifica bien.