Paseando por Perú

Llegamos a Perú por tierra desde Copacabana, Bolivia. Nuestra primera parada fue Puno, en donde fuimos a un bar a comer pizzas y bailar. Para la fiesta estuvo bueno el lugar pero para la pizza... not so much. Luego viajamos toda la noche rumbo a Cusco.

Día 1: Cusco

Nos hospedamos en el hostal Pirwa Colonial, un hospedaje bastante bien ubicado cerca del centro de la ciudad. Luego de instalarnos, pudimos hacer un recorrido por la que fue mi ciudad favorita en todo este viaje.

La Plaza de Armas

Esta plaza está rodeada de hermosos edificios coloniales con balcones y galerías arcadas. Nosotros, de hecho, almorzamos en uno de ellos: hay varios restaurantes con vista a la plaza. De ahí se puede ver la Catedral Mayor, a la que no pudimos entrar (seguimos con la mala suerte) pero se ve hermosa desde afuera.

Museo Inka

Este museo me pareció fascinante. Las exposiciones eran muy variadas, desde herramientas de la época hasta maquetas replicando monumentos; desde huesos hasta joyas. Yo sé que los museos no son para todos, pero este recomiendo visitar, yo salí encantada.

Barrio San Blas

De ida al barrio, paramos a ver la piedra de los 12 ángulos, que no sé qué me imaginé que sería pero ciertamente no esperé encontrarme con lo que vi. En el barrio de San Blas hay varios bares y artesanía local que podés ir descubriendo a medida que te adentrás en las callecitas empedradas.

Mercado de San Pedro

Ahí se pueden comprar artesanías, ropa y comida. Yo llegué tarde y estaban cerrando, pero todos los que fueron salieron con muchas compras a precios muy bajos.

Día 2: Ruta Alternativa a Aguas Calientes

Después de desayunar, salimos temprano rumbo a la Hidroeléctrica desde donde comenzó nuestra caminata de unos 10 km hasta llegar a Aguas Calientes. La alternativa a esto es tomar un tren desde la Hidroeléctrica o desde Cusco.

Nosotros decidimos caminar, pero no contábamos con que el viaje de aproximadamente 5 horas hasta la Hidroeléctrica fuera tan cansador. La caminata acompaña las vías del tren (cada tanto se escucha un silbido y eso significa que hay que alejarse de las vías porque el tren va a pasar) y nos tomó unas cuatro horas en total, pero realmente el paisaje era muy lindo y resultó muy fácil de disfrutar.

En Aguas Calientes volvimos a hospedarnos en un hostal de la cadena Pirwa. Esa noche compramos nuestros pasajes para subir en bus hasta la ciudad perdida del Inca (aka Machu Picchu). Se puede subir caminando pero la subida dura más o menos una hora y media, y en ese momento, esa idea no parecía la más agradable jajaja.

Fun Fact: Aguas Calientes es un pueblito tan chiquito y remoto que no vas a ver autos por las calles.

Día 3: Machu Picchu

Dedicamos casi todo el día a recorrer Machu Picchu, incluyendo una escalada a la cima del Huayna Picchu. Nos tocó un día bastante bueno dentro de todo, a la mañana estaba soleado y recién a la tarde comenzó a nublarse e incluso a lloviznar un poco - justo cuando habíamos terminado nuestro recorrido, por suerte. 

Hay demasiado que contar, detalles y costos, así que escribí otro post para que esto no se vuelva demasiado largo. 

Nos recomendaron no comprar nada para comer en Machu Picchu porque los precios están muy inflados, pero nosotros habíamos arrancado un poco lento nuestro tour así que nos faltaba mucho por ver y decidimos almorzar ahí arriba de todas formas. A la tarde, luego de terminar de ver todo lo que quisimos ver, volvimos a descender en el bus que nos había llevado hasta la cima.

Día 4: Vuelta a Cusco

El mismo recorrido pero a la inversa: Salimos de Aguas Calientes temprano, frescos para la caminata que duró bastante menos tiempo esta vuelta. Fuimos hasta la hidroeléctrica, tomamos una van y llegamos a Cusco al atardecer. 

Habíamos dejado nuestras mochilas en el hostal para no cargarnos en Aguas Calientes, además el hostal tiene servicio de lavandería así que retiramos nuestra ropita limpia también. Ese día fue prácticamente de descanso, cenamos en el bar del hostal y nos preparamos para volver hacia Bolivia al día siguiente, rumbo a Asunción.